Un menor de 10 años murió ahorcado en su vivienda del distrito limeño de San Juan de Lurigancho, tras haber practicado el “juego de la asfixia”.

El cuerpo del niño de iniciales L.S.C. fue encontrado colgando de una viga en su cuarto, precisó la Policía Nacional.

Un compañero de la víctima había fallecido semanas atrás de la misma forma, detalló una tía del menor.

“Mi sobrino sabía de eso. Sus padres le aconsejaron que nunca haga eso ya que así había fallecido su amigo”, precisó.

Descartó asimismo que el menor se haya suicidado porque no tenía problemas familiares ni en la escuela.

“Cuando recibí la noticia pensé que lo hizo por cuestión de notas en el colegio o algún problema familiar, pero nada de eso ha ocurrido”, agregó.

Conociendo el juego

El juego de la asfixia es desarrollado generalmente por menores de edad alrededor del mundo, según reseña la enciclopedia Wikipedia.

Consiste en que un compañero pone sus manos en el cuello y aprieta hasta inducir el desmayo, al quedar restringido el oxigeno que va al cerebro.

Muchas veces las fatales consecuencias de este juego llevan a dar un diagnóstico equivocado, relacionando la muerte del individuo con el suicidio.

Algunos menores ahora están agregando un elemento sumamente peligroso, ya que no buscan a un compañero que intente asfixiarlos con las manos.

Por el contrario, entran en su propio closet y agarran una corbata, una correa o una soga y lo hacen por su cuenta, sin que nadie pueda observarlos.
la sangre al cerebro.

Normalmente los accidentes fatales ocurren cuando los adolescentes reproducen el juego practicado por sus amigos en la escuela solos en sus casas.

Al intentar llevar a cabo solos el estrangulamiento con pañuelos, cinturones o cuerdas, los niños o jóvenes pierden el control de sus movimientos y empiezan a sufrir convulsiones, acabando asfixiados.

La falta de oxígeno en el cerebro causa la pérdida de la consciencia, con alucinaciones y sensación de placer.

Estos efectos pueden ser similares a los causados por el consumo de drogas.