A: Saludos... es una bonita historia...
Me gustan los lobos, son mi animal favorito con diferencia sobre cualquier otro. El lobo está envuelto históricamente en un halo de magia y ocultismo, nocturnidad, bosque e inteligencia, un animal que vive en comunidad, donde todo indivíduo es importante, capaz de cazar a presas mucho mayores que él gracias a un sistema de miradas con el que establecen un plan PERFECTO improvisadamente.
Cuidadosos de sus cachorros, todas las hembras se ocupan de ellos en caso de que la loba parida no pueda, viven en clanes establecidos y jerarquizados, tienen su ley INQUEBRANTABLE y conservan sus territorios de caza y grupo. Cuando un miembro está inutilizado, éste recibe los mimos incluso del Jefe de la Manada...
Esa solidaridad, sociedad, reglas y sacrificio por sus semejantes me fascina, ese orden y cuidado de los pequeños me maravilla para los tiempos que corren.
El brillo reflejado en su ojo, es, precisamente, ese punto de inteligencia que tiene el lobo, esa mirada que asusta al más pintado.
Hasta aquí las razones del Lobo.
El ojo con dos lágrimas también tiene su motivo: una es por un compañero y otra por una amiga, de poco más de 30 años: ambos fallecidos; el primero de una agónica enfermedad cuando más le sonreía la vida, y la segunda de un tremendo accidente de tráfico por culpa de un vehículo que adelantaba a otro en un cambio de rasante cuando ella venía de cara. Tenía muchos proyectos para un futuro CERCANO con su joven marido... compartió mucho tiempo con Piaza (mi esposa), y era una chica razonable, sensata, consciente de la realidad...
ESpero haberte aclarado el misterio, aún sin saber quién eres...
Un saludo.
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