Bien es verdad que hay bares que sirven algunos cafés que parecen hechos con agua sacada de las cloacas, pero eso no es lo que nos ocupa.
Lo que estáis viendo es un ingenioso anuncio para la marca de café Folgers que se pudo ver en las alcantarillas de Nueva York.
Como sabéis, cuando hace frío las cloacas exhalan ese vaporcillo característico del agua caliente que las recorre. A alguien se le ocurrió aprovecharlo para hacer publicidad de una humeante taza de café haciendo que la gente, muerta de frío, deseara con fuerza tomarse uno. Para reforzar la idea, alrededor de la “taza” leemos el siguiente mensaje: “¡Ey, Ciudad que nunca duerme! ¡Despierta!”.
No cabe duda de que el efecto está logrado. No me extrañaría que algún habitante de la ciudad con mono de cafeína se lanzara contra el suelo dispuesto a lamer el pavimento. Total, el sabor no tiene que ser muy diferente al de un carajillo sin azúcar (imaginaciones mías).
A mí, desde luego, me convencería. Lo malo es el olor que despide el vapor… pero como en esta época del año la mayoría de la gente está resfriada, supongo que dará igual.
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